"Misterio en Consulta: ¿Por Qué un Bebé de Diez Días Pesa Menos que al Nacer?"

En esta ocasión, quiero hablar sobre una situación que me encontré hoy en mi consulta y que estoy seguro pudo ser la preocupación de algunos padres lectores de este Blog y para otros será de interés. Se trata de un bebé de apenas diez días de vida que, sorprendentemente, pesa menos ahora que cuando nació.

El aumento de peso es un indicador crucial de la salud de un recién nacido. Por eso, cuando un bebé muestra una pérdida de peso en los primeros días de vida, es natural que los padres y cuidadores se preocupen. Aunque pueda ser inquietante, es importante comprender que hay razones médicas detrás de esta situación. La pérdida de peso en los recién nacidos durante los primeros días de vida es un fenómeno bastante común y normal. Aunque puede ser preocupante para los padres, es importante entender que existe una serie de razones fisiológicas detrás de esta pérdida de peso inicial.

En los primeros días tras el nacimiento,
es normal que los recién nacidos pierdan alrededor
del 5 al 7% de su peso corporal.

Durante el proceso de nacimiento, los recién nacidos eliminan líquido a través de la orina y el paso del meconio, la primera materia fecal. Además, el calostro, el primer tipo de leche materna que se produce, tiene un efecto laxante que contribuye a la eliminación de líquidos y residuos del sistema digestivo del bebé. Esto puede llevar a una pérdida temporal de peso.

Además, los recién nacidos tienen estómagos muy pequeños y su capacidad para ingerir y digerir cantidades significativas de leche es limitada en los primeros días. Esto, combinado con el hecho de que la producción de leche materna puede demorar un poco en establecerse completamente, puede resultar en una disminución del peso durante los primeros días.

La pérdida de peso en los recién nacidos en los
primeros días de vida es una respuesta normal.

En general, se espera que los recién nacidos pierdan alrededor del 5 al 7% de su peso corporal durante los primeros días después del nacimiento. Sin embargo, esto suele ser temporal y la mayoría de los bebés comienzan a recuperar peso una vez que la producción de leche materna se establece y su sistema digestivo se adapta.

Es importante tener en cuenta que la pérdida de peso excesiva o prolongada puede ser motivo de preocupación y debe ser evaluada por un profesional de la salud, como un pediatra. Los médicos pueden monitorear el peso del bebé y brindar orientación sobre la lactancia materna, el amamantamiento, la fórmula o cualquier otra preocupación que los padres puedan tener.

Después de las dos primeras semanas, un bebé sano
 comienza a aumentar de peso de manera estable.

En resumen, la pérdida de peso en los recién nacidos en los primeros días de vida es una respuesta normal y temporal a los procesos fisiológicos que experimenta el bebé. Siempre es recomendable comunicarse con un profesional de la salud si tienes inquietudes o preguntas sobre el peso y la alimentación de tu recién nacido.

Autor: Dr. Franklin Fernández Torres.

Pediatra / Post grado en nutrición infantil.

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