DESNUTRICIÓN EN ECUADOR: MI PERSPECTIVA COMO PEDIATRA.

En la edición de julio la Revista Vistazo publicó un interesante artículo sobre la desnutrición en el país y señala que los índices de desnutrición en la población infantil del país son superiores qué en Haití. No es de extrañar el asombro al escuchar esta comparación si consideramos qué Haití es el país de la región más empobrecido. No pretendo debatir el artículo en sí que se centra en los problemas de ineficiencia gubernamental fundamentalmente para poder bajar estos indicadores de salud que durante años han afectado a la población infantil de Ecuador.

Desde mi perspectiva como médico pediatra, Diplomado en nutrición, con la experiencia de haber vivido en un país en crisis económica prolongada, sobre todo en cuanto a disponibilidad de alimentos se trata, me gustaría tratar de ayudar a la familia ecuatoriana para abordar esta problemática desde el seno de su familia incrementando el nivel de cultura nutricional, ya qué considero es lo que está fallando.

Es alarmante el número cada vez mayor de recién nacidos que se inician con la lactancia artificial de fórmulas lácteas desde las primeras horas de nacido con un abandono muy precoz de la lactancia materna. La lactancia materna debe ser el alimento exclusivo del menor de 6 meses de nacido. Incorporar una fórmula láctea antes de este tiempo trae consigo innumerables repercusiones desfavorables para la salud infantil, no solamente para la salud nutricional,  sino también para prevenir otras enfermedades como las infecciones respiratorias, las infecciones digestivas e infecciones parasitarias entre otras.

Todos sabemos lo importante que es la introducción de la alimentación complementaria de una manera organizada y paulatina en la alimentación del niño antes de que esté cumpla el año de edad . Contamos con 4 o 5 meses para introducir los alimentos esenciales que van a permitir un crecimiento y un desarrollo adecuado del niño. En este punto la cultura nutricional ecuatoriana es baja y vemos niños que han llegado al año de edad sólo a base de fórmulas lácteas y jugos. Después de los 6 meses de edad se comienza a introducir la alimentación complementaria a base de jugos naturales pero también de cremas y papillas no solamente de frutas, sino de una gran variedad de tubérculos y legumbres que si están a disposición de las familias. La carne, el hígado y de vísceras y el pescado son alimentos fundamentales que debemos introducir después del séptimo u octavo mes, comenzando primero con las carnes y hacia el 10 mo mes  el pescado.

En los menores de 5 años existe otra manifestación de desnutrición muy frecuente que es la anemia nutricional por deficiencia de hierro y está relacionada con la pobre ingesta de alimentos fuentes de hierro como son el hígado y las carnes, la yema de huevo, los frijoles y ensaladas de hojas verdes. Esta incultura nutrional se suma al exceso de lácteos en la dieta infantil.

La creencia popular de que las sopas y caldos contienen los elementos nutricionales necesarios para alimentación de un niño es otro de los factores negativos que atentan contra su buena salud nutricional. Ya he tratado en mi blog porque las sopas no siempre son nutritivas.

En el mercado contamos con una gran variedad de granos, pero por lo general se consume uno o dos tipos de estos dejando a un lado otros granos también fuentes de minerales importantes para la alimentación del niño que previenen la aparición de las anemias fundamentalmente. Los granos secos son fundamentales para prevenir las anemias y no sólo la lenteja sino que también los frijoles negros, rojos, el canario y garbanzos deberían incrementarse en el consumo semanal de nuestros niños.

Son muchos los padres que acuden a mi consulta nutricional preocupados por la talla de sus hijos. el pobre incremento de la talla infantil también es un indicador de desnutrición y la clave para su solución está en una mejor alimentación desde su nacimiento. Otra de las preocupaciones de nuestras familias es el pobre rendimiento escolar que algunos niños manifiestan en sus clases. Los trastornos del aprendizaje, cuando se han excluido otras causas como enfermedades mentales por ejemplo, pueden tener su origen en una mala alimentación infantil.

No basta con preocuparnos por examen periódico de sangre o por un deparasitado regular, tenemos que tomar conciencia en el seno de nuestras familias para que nuestros hijos reciban una mejor alimentación,  qué a manera de resumen consistiría en:

1. Prolongar la lactancia materna por lo menos hasta los seis primeros meses de vida.

2. Incrementar paulatinamente y de una manera ordenada bajo supervisión médica los alimentos que el niño va a consumir después del sexto mes para que llegue al año con una dieta abierta similar a la del adulto donde ya el niño coma de todo.

3. Considerar el arroz y  otros cereales y las legumbres junto a las carnes como alimentos fundamentales y primarios en la dieta sobre todo en aquellos en edad escolar.

4. Dejar de considerar la sopa como un alimento esencial y fundamental ya que está carece de los nutrientes necesarios para una buena alimentación.

5. Evitar el consumo excesivo de leche en el mayor de un año ya que interfiere con el aprovechamiento de muchos nutrientes de la dieta así como que le resta espacio para la introducción de otros alimentos.

6. Respetar el horario de la alimentación, el desayuno es fundamental y debe contener nutrientes contenidos en frutas, cereales y lácteos.

7. Una lunchera saludable también es una de las orientaciones a seguir. 

8. Fomentar el consumo del hígado y otras vísceras, así como también otros granos Además de  lenteja. 

9.  Proporcionarle a nuestros hijos frutas y fomentar el consumo de ensaladas las que ayudan a incrementar el apetito y a fijar los nutrientes del resto de los alimentos.

Por muchos programas gubernamentales que se establezcan,  por muchas misiones que el gobierno pretenda implementar si no comenzamos a cambiar y a mejorar nuestros conceptos de salud nutricional no vamos a poder salir de estos indicadores tan desfavorables.

Debemos comenzar a ver el problema de nutrición infantil desde nuestra perspectiva, desde el interior de nuestros hogares. 24 de cada 100 niños del país está desnutrido, uno de ellos puede ser el tuyo. Recuerda que la baja talla y la anemia también son manifestaciones de una nutrición deficiente.   No lo veas como un problema del país, míralo como padre o madre de familia. Eres el responsable de la salud de tus hijos. Te corresponde actuar a tiempo.

Recuerde escribir sus preguntas, comentarios, o sugerencia de temas, con gusto les responderemos. 

Para atención pediátrica acuda a nuestras consultas en Durán, Guayas. Para niños de 0 a 18 años.

Autor: 
Dr. Franklin Fernández Torres
Pediatra cubano, diplomado en nutrición infantil.
Durán-Guayas-Ecuador
Reg. Prof.  Libro 1E F-26 #71
+593995941468
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Consultorio Pediátrico Especializado Dr. Franklin Fernández Torres "porque te quiero sano"
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